Todas las familias sueñan con que llegue el verano: para los padres representa un período para poder pasar más tiempo en familia y para los hijos un exceso de tiempo libre para poder jugar sin responsabilidades escolares. Viviendo tiempos de pandemia, definitivamente este año tendremos un verano diferente, y es muy probable que aumenten las lesiones en el hogar y, por ende, lesiones que requieren visitar una sala de emergencia.
En este artículo revisaremos brevemente cuales son las lesiones pediátricas más comunes del verano y sobre todo repasaremos las medidas de prevención para disminuir su incidencia. Es de suma importancia recordar que hemos vivido tiempos de pandemia y que probablemente sea más aconsejable realizar actividades dentro del hogar. Por tanto, también será importante repasar las medidas de higiene entre todos los miembros de la familia para así prevenir la infección por COVID 2019.
Caídas: Las caídas son comunes en todos los grupos de edad, pero en los niños constituye la causa número uno en la lista. A pesar de que existen las caídas de trampolines y otros tipos de juegos al exterior, las caídas en los parques y áreas consideradas seguras siguen siendo las más comunes.
Medidas para prevenir caídas en el patio:
- El menor siempre debe estar supervisado por un adulto.
- Los columpios y chorreras deben ubicarse sobre superficie libre de cemento o concreto. Entre las superficies recomendadas se encuentran: arena, tierra, plástico o grama.
- El material de todos los equipos que tenga en el patio para jugar debe ser de plástico o algún material que no sea metal.
- Los trampolines no son recomendables, ya que se asocian con muchas caídas que resultan en fracturas que lo van a obligar a acudir a una sala de emergencia
Lesiones en la bicicleta: Anualmente, las bicicletas constituyen parte importante de los casos de trauma que llegan a la sala de emergencia en niños mayores de 7 años. Los brazos y piernas son las áreas más afectadas, pero el trauma en la cabeza es el más peligroso.
Otras medidas recomendadas son:
- Que la bicicleta sea de tamaño apropiado de acuerdo a la edad del niño.
- No remover las ruedas de entrenamiento hasta que el niño esté listo según el desarrollo neuromotor, usualmente cerca de los 8 años de edad.
- Enseñar al niño a que siempre debe guiar por la derecha y siempre en la misma dirección de tráfico.
- Nunca correr bicicleta de noche.
- Las patinetas y scooters hay que usarlas con el equipo protector en todo momento.
Lesiones de piel (quemaduras y mordeduras): Las quemaduras y mordeduras ocurren durante todo el año, pero tienen un pico importante durante el verano. La causa de las quemaduras varía dependiendo de la edad del niño. Es más común una quemadura por pirotecnia o fuegos artificiales en los adolescentes. Mientras que niños menores de 5 años están a mayor riesgo de quemaduras por líquidos calientes.
Recomendaciones a la hora de cocinar:
- Verifique la temperatura de los alimentos especialmente si usa el microondas.
- Si ha recalentado los alimentos, favor de ponerlos lejos de los niños. Esto evitará que lo agarre súbitamente y se pueda quemar.
- Los mangos de los sartenes y ollas SIEMPRE deben colocarse hacia la parte de atrás de la estufa.
- En la cocina por lo general es el sitio de almacenaje de los productos de limpieza y deben colocarse fuera del alcance de los niños.
- Nunca cambie líquidos de su botella original sin la debida rotulación.
No deje cables sueltos como los del teléfono, Ipad, plancha de pelo, plancha de ropa o abanicos. Los niños más pequeños pueden morderlos y esto puede causar quemaduras por electricidad.
Controle la temperatura del agua. Al bañar al infante debe utilizar el codo en lugar de la mano para verificar que la temperatura del agua sea la adecuada.
Las mordeduras usualmente ocurren en el hogar y es más común que sean causadas por un perro o gato que sea mascota de la familia o vecino. La estricta supervisión de la interacción del niño con la mascota debe estar presente en todo momento. Verificar el estatus de las vacunas de sus mascotas es importante, incluyendo la vacuna de la rabia.
Ahogamiento: No todos las lesiones con agua terminan en ahogamiento, pero los casi ahogamientos son muy frecuentes durante el verano, no solo en cuerpos de agua y piscinas del hogar sino también en el almacenamiento casero de agua. Solo se requieren dos pulgadas de agua para que un niño pueda ahogarse.
Entre las medidas que podemos tomar:
Nunca deje un niño sin supervisión en el baño; nunca dejar agua en la bañera, ni en los cubos de agua para pasar mapo; y cerrar siempre la tapa del inodoro.
Si para el verano que se acerca pensamos en tener una piscina de plástico en la casa hay que estar muy pendientes de la supervisión al alcance de la mano. Los adultos deben saber nadar, saber CPR y saber cómo dar primeros auxilios si ocurre un ahogamiento.
Para otras recomendaciones generales para prevenir lesiones favor visitar la página: http://healthychildren.org/Spanish